Te hablamos siempre de joyas únicas, pero ¿Qué implica eso realmente?
Joyas únicas por su diseño exclusivo, ya que su elaboración empieza siempre con un proceso creativo. Únicas por su elaboración artesanal, el valor de las joyas hechas una a una con nuestras manos, con un proceso muy elaborado que huye y se diferencia de grandes producciones en serie mecanizadas. Detrás de cada joya hay un proceso único, cuidado y minucioso.
A partir de una idea empieza el complejo y apasionante proceso creativo: nuestros diseños están muy pensados, es un proceso largo y elaborado que abarca emociones, valores éticos y sociales, texturas, acabados y matices. Cada detalle cuenta. Diseñar y crear nuestras propias joyas, conocer y analizar tanto de los materiales como la técnica implícita nos da una visión global del proceso.
Una vez tenemos el primer boceto, hacemos la primera muestra en el taller para pulir detalles más técnicos a la vez que somos conscientes con el medioambiente. Una vez perfeccionado el diseño ya tenemos la primera muestra de la colección. Diseñamos joyas atemporales y actuales para que sean para toda la vida.
El proceso de creación es un proceso minucioso y laborioso que se divide en varios pasos:
Empezamos fundiendo el oro o la plata (nuestras joyas solo están elaboradas en materiales nobles, no trabajamos con materiales tóxicos como el níquel).
Poco a poco vamos dando forma a la joya con las manos de artesanos expertos, con la ayuda del fuego y de las herramientas, como si de una escultura se tratara, son pequeñas obras de arte. Poco a poco vamos soldando, poco a poco lijamos, pulimos y, finalmente, y con mucho temple y precisión, engarzamos las piedras preciosas o diamantes.
Con la labor artesanal en el taller cada pieza es única e incorpora pequeños matices que la distinguen de otras joyas de la misma colección.
Esa es la magia de la artesanía. Adoramos cada perfecta imperfección que dan a nuestras joyas su personalidad y las vuelve únicas